Algo sobre salud. Alerta roja.
(Artículo de opinión
publicado en la revist electrónica Analítica.com (http://analitica.com/opinion/algo-sobre-salud-alerta-roja/
), el miércoles 13 de agosto de 2014)
Los temas médicos y sobre salud
en general están muy candentes. Prácticamente no hay conversación entre venezolanos
que no tenga que ver con algún aspecto triste y hasta desesperado de la salud.
Si no es la escasez de medicinas, es la dificultad para ser atendidos y obtener
diagnósticos y tratamientos adecuados. Últimamente ha repuntado la inseguridad
en la que se ven forzados a ejercer los médicos en los hospitales que han sido
profanados por manos asesinas.
En el meollo de esa situación de
descuido y negligencia sanitaria no sólo están los dólares que no dan para la
importación de sustancias farmacéuticas e insumos médico-quirúrgicos básicos,
esta también, como en casi todo, la corrupción y la criminalidad desatada en la
nación. Particularmente serio es el problema que ha generado la impunidad, que
ha agravado las dificultades hasta el punto en que los únicos mortificados y sufridos
son las víctimas inocentes que no encuentran los medicamentos que necesitan o
estos están vencidos y por tanto ineficaces y hasta dañinos. A la falta de
remedios se le juntan ahora la desilusión y la rabia endógena capaz de generar
hipertensión, gastritis y gran angustia, por decir lo menos, al ver y entender
la ciudadanía que el gobierno no ha hecho, no hace y no hará nada por corregir
la corrupción, la negligencia y la falta de interés en cuidar a los enfermos y
prevenir males peores.
Ya van varias veces que se
descubren grandes cantidades de medicamentos arrumados, botados o escondidos,
vencidos algunos e inútiles los demás por estar almacenados en condiciones
inadecuadas. También ha habido problemas serios, más o menos constantes con las
falsificaciones de medicamentos y las supuestas medicinas que no son tales, por
ser inertes o simplemente venenos.
Sobre las compras de
medicamentos vencidos ya se pronunció el TSJ: Nada que hacer… Con el gobierno
no se metan y si vienen de Cuba, menos. No hay culpables y como se prohíbe
investigar, tampoco se sabrá nunca cómo evitarlo.
Ya nuestros problemas de
atención a la salud dejaron de ser estrictamente locales. Venezuela está en
boca del mundo científico y médico internacional como bien lo relata un
artículo de la Revista SCIENCE de Agosto de 2014 (Vol 345 Nº: 6196, pág.: 499)
en el cual además se informa del repunte de viejas enfermedades infecciosas,
como el paludismo, el dengue y flagelos derivados de la falta de atención
preventiva como la mortalidad materna, ya superadas en el pasado y que
representan una caída brusca y fatal del cuido del estado hacia sus ciudadanos.
Tristemente el artículo termina con la información de que el 40% de nuestros
médicos recién graduados emigran en busca de horizontes y posibilidades mejores
de ejercer su ministerio de cuidar, asistir y aliviar de sus dolencias a los
seres humanos, aquí o en otro sitio.
En el exterior saben bien de la
calidad de la formación médica de nuestros graduados, de su dedicación y
habilidades profesionales. Aquí pareciera que quienes deberían entender ese
aspecto de nuestra profesión, más bien desprecian y descalifican esa calidad a
la hora de prestar el servicio que deben prestar, limitándolos en el uso de
recursos a ellos y a los pacientes.