Jugar al éxito
(Artículo de opinión
publicado en el diario El Nacional: http://www.el-nacional.com/opinion/Jugar-exito_0_397160424.html,
el viernes 25 de abril de 2014)
Lo usual es que se diga, “jugar al fracaso” y eso es, de hecho, lo que
está haciendo el oficialismo en aquel que le corresponde de los dos frentes
socio políticos en que está dividido al país: oficialismo y oposición.
Desde hace varios días todos los opinadores ligados al gobierno
nacional, aparecen diciendo que las guarimbas han fracasado y que ahora “la
oposición dará un salto al vacío”. Cuando la verdad es: primero, las guarimbas
no son una creación especial de la oposición para su protesta, segundo, los
manifestantes principales en esta coyuntura son los estudiantes y otros
jóvenes, y sus motivaciones, aún siendo apoyadas por la oposición, no son
políticas, sino de sentido común, de defensa de derechos humanos individuales y
colectivos, y de protesta por la inseguridad, la carestía y el desabastecimiento
de insumos de todo tipo, principalmente alimentos y medicinas.
En cuanto al fracaso o no de las protestas, a la prueba me remito:
están iguales o más fuertes, pues dada la ineptitud del gobierno nacional en el
manejo de las políticas públicas de seguridad, que se ha traducido en represión
brutal e indiscriminada, se han incrementado y expandido, como un cuero seco,
si aprietas por aquí, se levanta por allá… Pero, además, por parte del gobierno
nacional, en cuanto al mantenimiento del orden público, ha habido un
ingrediente malvado en la concepción,
artero en su ejecución y brutal en su resultado, que ha sido criminalizar la
protesta y añadirle gravedad a través de incitar y propiciar desmanes y
destrucción de bienes públicos por la utilización de los colectivos armados, la
mirada complaciente de la Policía Nacional Bolivariana (PNB), la Guardia Nacional
Bolivariana y la pasividad absoluta de la defensoría del pueblo, el Ministerio Público
y el resto de los cuerpos de seguridad del estado.
Los habitantes de algunos sitios del país, cómo es mi caso, en Chacao,
hemos sido testigos de que aún sin aparecer los manifestantes, horas antes, ya
están los PNB parados allí con actitud retadora hacia la gente y luego agreden
sin miramientos a feligreses en procesión religiosa y a estudiantes
pacíficamente echados en carpas.
Que quede claro, diáfano y fácil de entender: no estamos jugando al
fracaso del gobierno y luchar por el éxito
de nuestras protestas no es más que luchar por una Venezuela mejor, no importa
quien mande, lo que importa es que lo haga bien; sólo importa que esta
situación de extremada ineficiencia administrativa y financiera, en un país que
tiene una renta petrolera suficiente, se inviertan los recursos en sus
habitantes con equidad, constancia y solidaridad, respetando los derechos de
todos, absolutamente.
Así
pues, en la oposición, al menos yo,
estamos jugando al éxito de nuestras demandas y del país como un todo
indivisible.